La historia de los videojuegos, aun siendo relativamente corta –iniciada a mediados de los setenta y, si aceptamos como videojuegos los simuladores militares, viajamos hasta los cuarenta- cuenta ya con hitos fundamentales. Estos hitos suelen marcar de manera definitva el desarrollo posterior del género en que se inscriban. Así, ¡The curse of the Monkey Island’, de nuestro venerado Tim Schafer, supuso un antes y un después para las aventuras gráficas, y todavía a día de hoy, algo más de veinte años después de su aparición en el mercado, se recuerda explícita o tácitamente en los nuevos títulos de este género que salen a la luz. Pues bien, hay una compañía que es toda una experta en crear hitos, ya que cuenta en su haber con dos de las franquicias más importantes de los últimos tiempos: ‘Diablo’ y ‘World of Warcraft’. Efectivamente, estamos hablando de Blizzard.

De un tiempo a esta parte, Blizzard está trabajando en un nuevo MMO que identifica con el nombre de Titan. Ignoramos si ese será el título deifnitivo del juego, probablemente, o es un apodo que le han puesto al proyecto por lo ambicioso del mismo, que también podría ser. Recordemos que el poderío de ‘World of Warcraft’ es descomunal, hasta el punto de que uno de sus servidores –para usuarios chinos, fanáticos del farming– es uno de los cinco ordenadores más potentes del mundo.

Poco se sabe hasta el momento de Titan. Tom Chilton, director del ‘World of Warcraft’ ha declarado que el equipo de Titan se ha ido componiendo en parte por desarrolladores del WoW que, previamente, han estado durante un periodo de cuatro o cinco años instruyendo a nuevos fichajes.

Es probable que estas declaraciones de Tom Chilton nazcan del afán por calmar las inquietudes que puedan tener los aficionados al WoW, ya que hacia finales de año verá la luz una nueva expansión, ‘Mist of Pandaria’, y no querrá Chilton que los usuarios sospechen una bajada de la calidad porque los gurús del WoW han emigrado a Titan.

Pues ya está, ya lo ha dicho. Podemos jugar en paz.