Tras la crisis que ha vivido Nintendo, quedó claro que a sus productos, en concreto a Wii U, les hacía falta un buen surtido de buenos títulos. Y parece que la cosa empieza a funcionar poco a poco con reclamos irrechazables.
Este es el caso del nuevo y flamante ‘Donkey Kong Country: Tropical Freeze’, un juego que a continuación analizaremos al detalle y del que podemos decir, de entrada, que es una auténtica maravilla. Vamos a descubrirlo.
Retro Studios ha sido la compañía encargado de realizar este nuevo ‘Donkey Kong Country: Tropical Freeze’. Se pondrá a la venta el 21 de febrero, es decir, en tres días, y pretende ser uno de los mejores juegos de plataformas 2D del mercado. Merece la pena destacar, por cierto, este resurgimiento de las 2D integradas en 3D.
De entrada, podemos decir que no es un juego particularmente fácil. El nivel de dificultad se ha incrementado frente a anteriores entregas, pero también se ha incrementado el nivel de exigencia en el diseño de niveles. Ahora estamos ante un título pensado al milímetro por sus creadores, un buen reto, además, para el jugador experimentado.
Argumento, mapas y jugabilidad
La historia nos sitúa en el hogar de Donkey Kong. Allí está con sus compañeros Diddy Kong, Dixie y Cranky, un nuevo personaje jugable (antes era un mero comerciante). Pero unos maléficos barcos vikingos expulsan a nuestro héroe y sus amigos de su casa. De hecho, congelan las islas en las que habita Donkey. Nuestro objetivo, claro, será recuperar lo perdido.
Las partidas tendrán el esquema clásico de pequeños enemigos más un malo final a lo largo de seis mundos. Cada uno de estos mundos contara con entre ocho y doce niveles, además de tres niveles secretos. Podremos controlar a los diversos personajes (cada uno tiene ventajas específicas) a lo largo de nuestra aventura.
En cuanto al nivel técnico, poco podemos decir: el juego es excelente, cumple con creces con todas sus pretensiones. Luce muy bien y, seguro, será un gran reclamo para relanzar las ventas de Wii U. Tiempo al tiempo: con un buen catálogo siempre se puede llegar muy lejos.