‘Bioshock Infinite’ será la tercera entrega de una de las sagas más importantes que ha dado la última generación de consolas. Nos sorprendió en 2008 con ‘Bioshock’, que suponía una interesante vuelta de tuerca a los shooters, además de resultar sorprendente por su estética y su narrativa. Su secuela, ‘Bioshock 2’ supo a poco, sorprendió poco, y pasó sin pena ni gloria pero con un regusto de decepción en los usuarios, que teníamos las más altas expectativas.

Esas expectativas siguen en la cumbre con el tercer título que está por llegar: ‘Bioshock Infinite’. Recientemente hablábamos de los Boys of Silence (Chicos del Silencio), que serán unos de los nuevos enemigos que podremos encontrar en este videojuego. Pues bien, si aquel enemigo estaba bautizado por la ausencia de sonido, éste que hoy os presentamos se caracteriza por todo lo contrario. Nos referimos a las Sirens (las Sirenas).

Las Sirens aportarán al juego una vía espiritual de la que hasta el momento carecía. Aunque ignoramos con detalle cómo serán estos enemigos, por lo que hemos podido ver en el vídeo de presentación, serán criaturas de aspecto etéreo, vaporoso, con el poder de lanzar un chillido estridente que resucitará a nuestros rivales caídos. En palabras del propio Ken Levine, este poder de las Sirens condicionará los combates contra ella y obligará a los jugadores a decidir una estrategia: ¿Acabo primero con todos los esbirros y luego voy a por la Siren? Pero ella los resucitará cada dos por tres y será una tarea de nunca acabar….¿O voy mejor a por la Siren y ya luego me encargo de los esbirros? Pero en ese caso, me golpearán sin descanso, y son muchos… Cada jugador encontrará la opción que mejor se adecúe a su forma de juego; a fin de cuentas ésa es una de las virtudes de ‘Bioshock’, que permite a cada cual desarrollar diferentes modos de juego según decida evolucionar unas técnicas de combate u otras.

De momento, os dejamos el vídeo para que os vayáis haciendo el cuerpo.