Cuando salieron a la venta Xbox One y PS4 se habló mucho de su hardware, y no siempre para bien. En esencia, muchos críticos opinaron que no eran consolas demasiado potentes a juzgar por la tecnología disponible en el momento. Tanto es así que una de ellas, Xbox One, todavía presenta problemas para llegar a las resoluciones prometidas (1080).
Y ahora parece que están creciendo los rumores acerca de una posible adaptación a las resoluciones 4K que están ofreciendo las últimas y más avanzadas pantallas planas. A continuación analizamos los planes de futuro de Sony y Microsoft en materia de nuevas consolas. Ojo, porque habrá cambios pronto.
Forbes acaba de filtrar una curiosa noticia al respecto. Parece que las próximas evoluciones de PS4 y Xbox One estarán preparadas para la reproducción de vídeo 4k. Además, tendrán compatibilidad con el códec HEVC y un conector HDMI 2.0 incluido.
Lo que sorprende, sin embargo, es la fecha de lanzamiento de estas actualizaciones: todos los rumores indican que se producirá este mismo año, 2015, aprovechando la llegada de los modelos slim.
Un rumor con visos de realidad
En sendos comunicados oficiales, tanto Sony como Microsoft no han querido aclarar este detalle, de modo que no sabemos si es un rumor o algo más, pero por la forma de echar balones fuera y por experiencias previas, podemos suponer que algo se está cociendo.
El jefe de producto de Netflix, Neil Hunt (principal responsable del rumor que ha difundido Forbes) está convencido de que esto va a ocurrir y ha dicho que es normal que se produzcan revisiones de hardware pasados dos años desde el lanzamiento. Sin embargo, esto no es cierto: como mínimo han tenido que pasar tres años para que se realizarán actualizaciones de, por ejemplo, PS3 y Xbox 360.
Entonces, ¿tendremos 4k pronto o no? Lo que queda claro es que todavía no podremos disfrutar de los juegos a esa resolución. Para eso todavía queda un poco…