La semana pasada se celebró en San Francisco la Game Developer Conference (GMC), una feria en la que se dieron cita los principales desarrolladores de videojuegos del planeta.

En esta cita se extrajeron varias conclusiones acerca del futuro de los videojuegos. Tres fueron los puntos en común. Los videojuegos del futuro tendrán mucho que ver con los móviles, con producciones alternativas o indie y, sobre todo, serán multiplataformas.

En efecto, los representantes de Sony Playstation quisieron dejar muy claro su apoyo a los desarrollos de juegos independientes, y todo parece indicar que esta será la tónica en la industria del videojuego en general, incluso en plataformas avanzadas como la próxima generación de consolas.

Este año se presentaron en la feria 25 demos de juegos indies, más que nunca. Ahora, con el apoyo de un gigante como Sony, se espera que el número de pequeños grupos de desarrollo de juegos aumente. Su máxima virtud: el riesgo y la originalidad de sus propuestas. Entre los títulos más destacados, merece la pena reseñar a ‘Primal Carnage: Genesis’, un juego de acción con unos gráficos espectaculares; ‘The Witness’, en el que nos encontraremos en una isla desierta; o ‘Zombie Studio’, basado en el exitoso mundo de los zombies.

Multiplataformas y juegos para móviles

Aunque los grandes clásicos siguen manteniendo el tirón, está claro que cada vez tienen más fuerza los juegos para móviles y, sobre todo, los juegos multiplataforma. Y con multiplataforma queremos decir juegos que se pueden jugar tanto desde Facebook como desde la consola. La tendencia se conoce como cross-platform.

Y, sin duda, entre los juegos para móviles empiezan a tener mucho éxito los juegos basados en el modelo Freemium: juegos gratuitos en los que el usuario podrá mejorar sustancialmente si paga pequeñas cantidades.

Los datos recabados en la feria muestran un claro auge del PC y de las plataformas móviles, y un declive suave de las consolas de sobremesa, que parece que pierden fuelle frente a sus competidores. Lo importante, en cualquier caso, es que en el futuro seguiremos teniendo juegos. Y esperemos que sean tan buenos como soñamos.