Pese a que a priori el continuo vicio a las videoconsolas puede ocasionar sedentarismo y problemas de peso, algunos estudios han demostrado todo lo contrario. Pasar muchas horas delante de una pantalla apretando botones no parece una buena forma de quemar calorías. Sin embargo, gracias a algunos juegos entretenidos las personas obesas podrían conseguir atenuar los ataques de hambre que les hacen acudir a la nevera.
En Estados Unidos ya existen centros que utilizan juegos como parte de sus programas de adelgazamiento. La idea es que ver la tele y picar algo es fácil, pero si se tienen las manos ocupadas es mucho más difícil comer. Una de las participantes en el estudio, consiguió perder 6 kilos en cuatro semanas:
Mis ganas de picar se han reducido sensiblemente desde que comencé a pasar el rato jugando a este tipo de juegos.
El ser humano debe consumir de media unas 1.743 calorías diarias, si los juegos te distraen puedes evitar sumar entre 300 y 400 calorías que se derivan de las comidas entre horas.
Por otro lado, se ha demostrado que los videojuegos interactivos que retan al jugador a moverse para conseguir su objetivo en el juego o seguir el ritmo de coreografías marcadas por el propio dispositivo, son autenticas máquinas de quemar grasas. ¿Quién dijo que ser un adicto a las videoconsolas no requiere desgaste físico?